Evaluación y estimulación de funciones neuro-cognitivas

1. Identificación y corrección de patrones alterados de actividad neurofisiológica.
2. Estimulación de funciones neuropsicológicas: atención, concentración, memoria, aprendizaje, inteligencia, creatividad, lenguaje... 
3. Estimulación de la longevidad cerebral y prevención del deterioro cognitivo

Bienestar psico-emocional

1. Evaluación, regulación y equilibrio de emociones y estrés.
2. Identificación y reequilibrado de pautas emocionales ocultas, que están en la base de muchos desequilibrios, pautas erróneas de vida, trastornos psico-somáticos.
3. Identificación y equilibrado de bloqueos emocionales, traumas tempranos grabados en el inconsciente y en el campo energético de la persona.

¿Quiénes pueden beneficiarse de estas intervenciones?

Personas que han sufrido o tienen:

- Daño cerebral adquirido: Ictus, Traumatismo cráneo-encefálico, Accidentes cerebro-vasculares, Esclerosis múltiple, tumores, etc.

- Problemas neuro-degenerativos: deterioro cognitivo leve (DCL), demencias en fases leve y moderada.

- Disminución de su rendimiento cognitivo en todas las edades y quieren estimularlo para mejorar su eficacia en el trabajo, los estudios, etc.

- Secuelas de problemas sufridos en etapas vitales pasadas como la infancia y la adolescencia.

- Déficit cognitivo y problemas conductuales por TDAH adulto u otras dificultades de aprendizaje.

Adolescentes:

- Retrasos madurativos en los procesos cognitivos.

- Daño cerebral adquirido

- Experiencias de maltrato o abandono, con repercusión en el rendimiento cognitivo.

- Dificultades de aprendizaje ya diagnosticadas y/o que han recibido o reciben tratamiento psicopedagógico para estos problemas. El objetivo es estimular las áreas cerebrales responsables de las funciones cognitivas alteradas.